| La climatología dio un vuelco hoy en el  circuito de Hockenheim para la disputa de la carrera al sprint a 27 vueltas.  Unas amenazantes nubes negras descargaban una tormenta de lluvia tan sólo 15  minutos antes del inicio carrera, lo que hacía disminuir la temperatura del  aire y de la pista hasta 23 y 26 grados respectivamente. Con la pista todavía  húmeda y una fina lluvia cayendo sobre el circuito, el principal problema para  los equipos era si comenzar con neumáticos slicks o elegir el compuesto de  mojado, decisión que parecía no estar clara cuando había variedad en la elección  de gomas para los distintos monoplazas de la parrilla. Para Stefano, que  arrancaba quinto en la parrilla después de la cuarta posición lograda en la  carrera larga de ayer, el equipo Racing Engineering optaba por equipar su coche  con neumáticos slicks, mientras que para Lello, que partía 17º, la elección era  la del compuesto de lluvia.
 Cuando las luces del semáforo se apagaron,  todos los monoplazas que llevaban neumáticos de seco tuvieron serias  dificultades para encontrar algo de grip en la pista, al contrario de aquellos  que llevaban gomas de agua, que con una elección en ese momento más acertada  para el estado de la pista conseguían abrirse hueco en pista e ir progresando.  Por su parte, Lello hacía un comienzo de carrera absolutamente impresionante,  adelantando coches por todos los lados y avanzando hasta situarse 9º al final  de la primera curva, aunque pronto escalaría dos posiciones más hasta ser 7º  cuando todavía estaba en la primera vuelta. Sin embargo, un accidente en la  pista obligó al coche de seguridad a hacer su aparición cuando apenas había  dado comienzo la carrera, lo que iba a impedir al piloto italiano continuar  progresando en un inicio de carrera impecable. 
                  La carrera se reanudaba en la vuelta 4 y Lello  adelantaba rápidamente a Quaife-Hobbs para situarse 6º, superando a  continuación a Berthon y Palmer y lanzándose al ataque de Evans, al que sobrepasaba  para colocarse en una increíble tercera posición y rodando muy cerca del  segundo clasificado, Sorensen. Sin embargo, justo cuando estaba adelantando al  monoplaza del equipo MP Motorsport, Sorensen se iba largo en una curva  obligando a Lello a salirse por el exterior de la pista, con la mala suerte de  que al volver al asfalto el joven piloto italiano se encontraba con la caja de  cambios de su monoplaza bloqueada en 6ª velocidad, por lo que no tenía otro  remedio que regresar a boxes para retirarse después de haber hecho una  brillante exhibición de pilotaje sobre asfalto mojado. 
                  Stefano arrancaba de forma correcta pero se  vio sobrepasado ya desde el comienzo por los coches que llevaban neumáticos de  lluvia, así que cuando salía a pista el coche de seguridad se encontraba 13º y  con 8 posiciones perdidas con respecto a la parrilla de salida, aunque con la  buena noticia de ser el primer piloto que llevaba slicks, por lo que si la  lluvia se detenía y la pista comenzaba a secarse, esta situación podría darle  una gran ventaja al joven piloto monegasco. Stefano tuvo que luchar  inicialmente con unos neumáticos de seco en una condiciones de pista muy complicadas,  lo que le llevaban a perder más puestos en las siguientes vueltas, viéndose  relegado a la 19ª posición, pero la lluvia dejó de caer y las condiciones de la  pista fueron mejorando poco a poco, por lo que el piloto del equipo español  pudo comenzar a exprimir cada vez más su monoplaza y sus neumáticos para  comenzar la remontada, siendo ya 17º en la 9ª vuelta y marcando vueltas rápidas  personales de forma sucesiva. En el 11º giro, muchos de los pilotos que habían  montado neumáticos de lluvia entraban a boxes para montar el compuesto de seco,  y una vuelta después, Stefano aprovechaba para registrar la vuelta rápida de  carrera hasta ese momento, con un crono de 1:43.246 mientras rodaba en la 13ª  posición. 
                  El coche de seguridad volvía a salir a pista cuando  varios pilotos acababan de entrar a sustituir sus neumáticos de mojado, por lo  que el monoplaza de Racing Engineering marchaba ahora 8º y muy cerca de los  puntos. En la vuelta 14 Stefano rodaba ya en la 4ª posición persiguiendo a  Sorensen, al que lograba sobrepasar para situarse en posiciones de podio.  Apenas unos metros después de adelantar al monoplaza de MP Motorsport, Stefano  le ganaba la posición también a Vandoorne pasando a rodar segundo. La entrada a  boxes del líder Negrão hacía que Stefano pasase entonces a  tomar  la cabeza de carrera. 
                  Stefano apretaba ahora con  fuerza, y en la vuelta 17 rodaba 2,1 segundos por delante de Vandoorne y Nasr,  que en ese momento se encontraban inmersos en una batalla por la posición. En  el siguiente giro, Stefano marcaba de nuevo la vuelta rápida de carrera con un  crono de 1:30.317, pero Nasr, ahora en segundo lugar, comenzaba a rodar en  tiempos muy similares a los del piloto del equipo con base en Sanlúcar de  Barrameda, por lo que no podía permitirse el lujo de relajarse como se podía  comprobar cuando acto seguido registraba un tiempo de 1:29.055. Un muy incisivo  Nasr no se daba por vencido y en la vuelta 20 la distancia entre ambos se  reducía hasta 1,4 segundos, obligando a Stefano a marcar una nueva vuelta rápida  para mantener las diferencias. Cuando quedaban 5 giros para el final, la  diferencia entre el líder y el segundo clasificado era de tan sólo 1 segundo y  2 décimas, aunque en ese momento, y cuando el reloj se acercaba a la hora de  carrera, comenzaban a aumentar las probabilidades de que la carrera se  terminase por tiempo y no se pudiesen completar el total de las vueltas  previstas. El monoplaza de Racing Engineering continuaba mostrando su gran  velocidad cuando Stefano seguía mejorando sus cronos constantemente, pero Nasr  no se daba por vencido y continuaba presionando hasta reducir la diferencia a  tan sólo 1 segundo en la última vuelta, aunque Coletti daba lo mejor de sí  marcando al final otra vuelta rápida que le iba a permitir cruzar la bandera a  cuadros como vencedor con una ventaja de 1,2 segundos sobre Nasr. 
                La estrategia de Racing  Engineering de montar a Stefano los neumáticos slicks resultó ser a la postre  la correcta, permitiendo al piloto monegasco tomar una gran ventaja al realizar  una carrera impecable en unas condiciones muy difíciles y que hicieron estragos  en muchos pilotos. Para Lello fue un fin de semana muy decepcionante, con dos  problemas mecánicos de los que no fue responsable, pero que le dejaron sin  puntuar cuando merecía estar en el podio de las dos carreras. La siguiente cita de las GP2  series tendrá lugar en una semana en Hungría, donde Racing Engineering tratará  de lograr más victorias. |